
¿Por donde comienzas cuando tus ideas están desparramadas por la habitación?... algún chistoso diría: por el principio. No estoy para bromas. Tampoco me siento tan mal como para no reír. Simplemente no quiero hacerlo, no hoy, no ahora. Como a veces se decide estar feliz porque sí, hoy he decidido estar un poco más calmada, más seria, más observadora de lo común y es que la situación lo amerita.
Aun así, no estoy sola. Desde que te conocí nunca lo he estado. Gracias por acompañarme en cada momento bueno y no tan bueno; en cada preocupación; en cada alegría. A ti... muchas gracias, vida mía.
0 comentarios:
Publicar un comentario