
... hace un buen tiempo.
Era una mañana común y corriente, pero la habitualidad llegó a su fin cuando comenzaron los panoramas de aquel sábado. Lo ví, y sin querer noté en su mirada un dejo de extraña complicidad -inexplicable en aquel entonces, era un completo extraño- y que hoy se ha vuelto mi más fuerte lazo. Mi mitad.
Con el correr de los días seguimos hablando, profundizando lo que hoy es la más fuerte de las conexiones que alguien puede sentir. Porque tu, querido/a lector/a, si es que has amado de esta manera, me entenderías. De lo contrario, no estás ni cerca de imaginarlo.
Somos tan iguales y tan distintos al mismo tiempo.
... son almas más que cercanas, tu llámalo como quieras, creo que algunos lo conocen como almas gemelas. Querida alma gemela espero que me leas, allí donde quiera que estés lucharé contra el viento y la marea, yo se que es así no espero que me creas, busco en mi otra mitad y no hay duda de que tu lo seas...
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